Como ya lo publicamos en anteriores artículos, con extrañeza hemos visto cómo desde la posesión del actual gobierno del Señor Gustavo Petro, el gobierno del CAMBIO (2022 – 2026), la administración del Ministerio de Relaciones Exteriores ha dado una vuelta de 360° y más, desafortunadamente para mal, en lo relacionado a las respuestas que obligatoriamente las autoridades deben dar a las peticiones de los ciudadanos (Ley 1755 de 2015), acudiendo a tecnicismos interpretativos a su favor, o mejor, en contra de la ciudadanía, y que por lo extenso de su argumentación no trataremos al detalle en este artículo, sino que lo iremos desmenuzando por partes en futuras publicaciones.
Afrontaremos la persecución de Cancillería
Lo que si queremos es hablarles de lo último; de las medidas que hemos tenido que tomar contra lo que llamamos “animadversión”, “persecución”, “represalias”, “odio”, “venganza”, “intento de censura a la información”, y todos los demás calificativos que se le quieran dar a las actuaciones de la Cancillería colombiana en el tema de autos contra nosotros, y más directamente contra quien lidera esta causa, Ricardo Marín Rodríguez.
Cometimos un gran error
Dado a un gravísimo error cometido por la asesoría jurídica de esta Casa Informativa, pero que nuestro director Ricardo Marín Rodríguez asume como suyo, al presentar dos acciones de tutela por un mismo hecho contra el Ministerio de Relaciones Exteriores, lo que hasta el momento no hemos podido saber cómo ocurrió, y solo se nos ocurre llamarlo “torpeza”, y que las leyes lo establecen como “Acción temeraria”, a esa Cartera ministerial se le han subido los zumos sintiéndose ganadora de no sabemos qué, y ha tomado ese pronunciamiento de la justicia, que va dirigido exclusivamente a las tutelas presentadas, como un argumento para aplicarlo a nuestros derechos de petición. Aclarando que por nuestro error, o más bien
c…g…dota, ya pedimos disculpas a la justicia y a la Cancillería, aunque ésta última no las quiso aceptar, y prefirió seguir en pie de guerra, olvidándose que los colombianos solo podremos conseguir la “Paz total” si la aplicamos primero en nuestros corazones.
(Atención en Consulados colombianos continúa empeorando por culpa del SITAC)
La Justicia ordena a Cancillería entregar documento
Pero vamos al caso concreto del tema de hoy:
Uds. recordarán que bajo el titular “La justicia ordena a Cancillería entregar documento base del Plan Piloto de la Mesa Colombiana de las Migraciones”, informamos los pormenores del fallo a nuestro favor del Jugado 26 Penal de Conocimiento de Bogotá, al ordenar al Ministerio de Relaciones Exteriores entregar a COLEXRET el Convenio mediante el cual se gastó una gran millonada en el desarrollo de la “payasada cirquera” o “Plan Piloto Rumbo a la Conformación de la Mesa Nacional de la Sociedad Civil para las Migraciones”, ya que se nos había negado su entrega real.
Con tutelas hemos protegido nuestro derecho de petición
Hasta hace unos pocos días, la intención de COLEXRET cuando interponía una Acción de tutela contra cualquier entidad por vulneración a nuestro derecho de petición, no era la de hacer sancionar disciplinariamente a través de multas o despidos de sus cargos a los funcionarios que hubieren cometido el atropello, sino conseguir que nos respondieran con claridad, de fondo y veracidad lo solicitado, tal y como lo establece la Ley 1755 del 2015, y la innumerable jurisprudencia emanada de nuestras Altas Cortes y Tribunales; y es así como hemos conseguido, que a través de más de 200 tutelas interpuestas en los últimos 10 años, determinadas entidades, entre ellas la Cancillería como la más, han tenido que dar respuesta a todas nuestras peticiones. A regañadientes, con trabajas, tardías, maldiciendo, “mentándonos la madre”, “queriendo matarnos”, pero han tenido que responder, y eso nos llena de orgullo.
Pero como todo tiene un límite en la vida, nos cansamos de ser tan buenos, y de tomar esa vulneración a nuestro derecho de petición como un error simple y justificado de parte de los funcionarios, máxime cuando vemos, en el caso de la Cancillería, que lo hace con mala intención, para que la información sobre sus injusticias y vulneración de derechos no llegue a la población migrante, en especial a los colombianos en el exterior.
Pediremos investigaciones disciplinarias
Cansados de ello, a partir de ayer, hemos tomado la decisión de que cada vez que un Juez establezca vulneración a nuestro derecho de petición, por quien sea, solicitar una investigación disciplinaria para que se castigue, bien sea con multas económicas o destitución de sus cargos a los funcionarios responsables.
(Pasado, Presente y Futuro de la Política Migratoria Colombiana)
Pues bien, tal y como lo pueden ver aquí, comenzamos por solicitar al Ministerio de Relaciones Exteriores, con copia a la Procuraduría General de la Nación, que se de aplicación a lo establecido en los artículos 14 y 31 de la Ley 1755 del 2015, y se sancione disciplinariamente a los funcionarios de la Cancillería que vulneraron nuestro derecho de petición al no hacernos llegar dentro de los términos y formalidades que establece esa misma ley, el documento mediante el cual se firmó el convenio con la Organización Internacional de las Migraciones “OIM”, para la realización del tal Plan Piloto de la Mesa Nal. de la Sociedad Civil para las Migraciones, y cuyo costo según “Colombia Nos Une” fue de CIENTO NOVENTA Y CINCO MILLONES
($195´000.000) DE PESOS, pero que al ver el documento, apreciamos un total de MIL CIENTO SESENTA Y DOS MILLONES ($1.162´000.000) DE PESOS, aclarando eso si que se incluyen otras acciones o actividades a llevar a cabo por parte de la “OIM” para la población migrante, y que ya estamos investigando de cuáles se trata y el costo por cada una de ellas.
Se acabó nuestra bondad para los funcionarios de la Cancillería que responden nuestros derechos de petición, ya no más concesiones. Empezamos como mansas palomas y sus acciones nos han puesto garras convirtiéndonos en águilas, así que en adelante no les vamos a rebajar ni media. Les pedimos que esa entidad haga lo mismo con nosotros, pues aunque ya lo hemos solicitado desde hace muchos años y no lo han hecho, ¡por favor!, ¡por favor!, si consideran que nuestras actuaciones vulneran sus derechos, que irrespetamos funcionarios, que atentamos contra la buena imagen de la institución, que los miles de interrogantes incluidos en las peticiones que hemos presentado les afectan, acudan a la justicia, donde nos presentaremos con el mayor gusto a mostrar las pruebas y razones que ostentan nuestras denuncias y publicaciones, pero dejen ya de seguirse quejando y hacerse las víctimas, pues ustedes en realidad son los verdugos, y la población migrante, en especial los colombianos en el exterior y retornados, son las verdaderas víctimas de sus injusticias.
Aunque existe mucha jurisprudencia sobre las sanciones disciplinarias para los funcionarios que vulneren el derecho de petición de los ciudadanos, tendremos que esperar la interpretación que le de el ente investigador, en este caso la propia Cancillería, esperando que siente un procedente en esa Institución para que casos de estos no se repitan, pues son los que realmente ponen en tela de juicio la imagen y credibilidad de la misma.
De todas formas, y aunque la Procuraduría General de la Nación tomará nota de este asunto, pues ya pusimos en su conocimiento los hechos, vamos a estar muy pendientes de la investigación para evitar que suceda lo mismo que con otras, como la adelantada a la ex Directora de Asuntos Migratorios, Consulares y Atención al Ciudadano, Fulvia Elvira Benavides Cotes, quien luego de haber sido sancionada en Primera instancia, y corroborada su responsabilidad en Segunda, con suspensión de sus funciones durante OCHO (8) MESES, no se la pudieron aplicar porque la acción había prescrito, dado a que transcurrieron CINCO (5) AÑOS desde la consumación de los hechos hasta el momento de finalizar la investigación. (Investigación disciplinaria contra Directora de Asuntos Migratorios y Consulares de Cancillería quedó en nada por prescripción).
(Cancillería complacida con el mal servicio y atención en Consulados)
Y precisamente el denunciar esos hechos públicamente, es que creemos puede ser uno de los motivos para que la Cancillería colombiana nos haya cogido entre ojos e iniciado esta “persecución” que no sabemos hasta dónde ira a llegar, pues de parte nuestra jamás dejaremos de INSISTIR, PERSISTIR, RESISTIR y NUNCA DESISTIREMOS de denunciar las injusticias y vulneración de derechos contra nuestros connacionales residentes en el exterior, los retornados, y toda la población integrante de la temática migratoria colombiana. Y con el respeto que se merecen nuestros lectores, utilizando la grotesca, humillante, y vulgar expresión de la actual Representante a la Cámara por los colombianos en el exterior, Carmen Felisa Ramírez Boscán, si no les gusta…”De malas” (Ver aquí).
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