A continuación nos permitimos transcribir este importante mensaje publicado como Prefacio en el libro “Gestión Migratoria Inexistente” de la colección “Colombianos Invisibles”, de autoría de Ricardo Marín Rodríguez y Lucy Torres.
Por: Lucy Torres, ciudadana Colombo Americana, Abogada, Investigadora de Migraciones, y Escritora.
“El trasladarse a vivir al extranjero conlleva expectativas de mejores oportunidades y de una superior calidad de vida, acrecentadas por los casos de éxito y por los fenomenales resultados que brindan los emigrantes a sus familias y a la economía colombiana. Pero salir del país implica grandes sacrificios que son subestimados. Con mayor o menor velocidad y profundidad, según sus razones, edad y país escogido, quienes emprenden un proyecto de vida en el exterior deben enfrentar una jornada llena de desafíos, que demanda humildad, persistencia y verdadera resiliencia.
La desconexión con el país de origen implica una suma de experiencias que impactan profundamente: la separación familiar y socio-cultural, perder licencias, seguro de salud, permiso de conducir y todo el ecosistema profesional y económico; el cambio de clima, alimentación y medicinas; llegar a un entorno desconocido, coexistir con otras culturas, trabajar entre extraños, la falta de acceso a servicios básicos y la soledad. Todo ocasiona un gran esfuerzo físico y un choque emocional que se asimila a un duelo, que en adelante es un inseparable compañero.
Hay dos opciones: darse por vencido y devolverse, o encontrar coraje para sobrevivir, y desplegar creatividad para incorporarse al nuevo país e irse transformando hasta lograr una vida exitosa entre dos países.
Todas esas vivencias de los emigrantes, se repiten y hasta se amplifican dolorosamente al regresar. Fue el caso del coautor de este libro, Ricardo Marín Rodríguez, quien, después de residir por 12 años en Europa, en el 2012 se unió a un Programa piloto de Retorno Productivo creado por el SENA, la Cancillería colombiana, y la fundación española INCYDE, para 300 colombianos residentes en España.
A pesar del acompañamiento institucional, la historia no tuvo final feliz, la alegría del retorno les fue anulada por requisitos imposibles de cumplir en los procedimientos. Los 300 tuvieron que confrontar la fría realidad: la ignorancia de las leyes y de las realidades del proceso migratorio ocasionan incompetencia en la gestión pública e inefectividad en el ejercicio de los derechos. Al final, algunos regresaron a España; otros buscaron alternativas para reintegrarse, pero con profundo desaliento confirmaron lo que todavía viven más de 5 millones diariamente, al país se le ha olvidado que Seguimos Siendo Colombianos. Tanto los ciudadanos que viven en el exterior, como sus familias y los retornados, somos invisibles para las instituciones colombianas.
Ricardo Marín y unos pocos iniciaron una cruzada legal para hacer efectivos los derechos de quienes se incluyeron en el programa, logrando resultados positivos. Ricardo entonces buscó que las normas cobijaran a todos los retornados y fundó COLEXRET para informar a los migrantes y difundir la compleja e invisibilizada problemática migratoria.
Descubrí a COLEXRET en el 2013 en Nueva York, preparando mi programa radial sobre la participación política en las elecciones del Representante por los Colombianos en el Exterior. Encontré información y opinión, mezcladas con franqueza y coherencia, denuncia de las falencias de las normas, y un diálogo abierto con la comunidad colombiana en el mundo, la verdad con superiores resultados que los logrados por los Representantes elegidos y muy bien pagados para cumplir estas tareas.
Hoy COLEXRET es prácticamente una Academia de migración colombiana, seguida por miles de ciudadanos en el mundo. No es de sorprender que el Dr. Iván Duque acogiera algunos de sus planteamientos en su propuesta de campaña a los Colombianos en el Exterior. Ricardo es un reconocido asesor de migración y participación ciudadana; su opinión, muchas veces incómoda, es honesta, certera y valorada por entidades públicas, legisladores, conferencistas, investigadores y estudiantes de las universidades Nacional, Externado, Santo Tomás, y Javeriana, entre otras.
Por mi parte, también avanzaba mi investigación para un libro sobre la diáspora, que me trajo a Bogotá, y por supuesto entrevisté al Director de COLEXRET. Como abogada aprecié su conocimiento y su compromiso social, y me sorprendió su gran lista de gestiones por los migrantes. Todos los colombianos podríamos aprender a utilizar los Mecanismos de Participación Ciudadana, que le han permitido a Ricardo, sin ser abogado, interponer derechos de petición y tutelas con prodigioso éxito.
Yo también creo fervientemente en la importancia de participar y de empoderar a la comunidad emigrante mediante la información. Por ello he publicado libros como DE CLICK EN CLICK -Guía de estrategia online-, y CONQUISTE EL MERCADO AMERICANO -Guía de negocios internacionales para llevar nuestros productos a EE.UU. aprovechando el TLC-.
En casi 20 años en el exterior, he tenido la oportunidad de difundir en radio, periódicos y revistas, los logros y vivencias de los colombianos en el mundo, y de colaborar en la conformación de canales de divulgación online y en la organización de eventos de connacionales desde Miami hasta el área de Nueva York. He aportado mi voz en busca de la democratización y la inclusión en los partidos políticos. Hasta en los recintos del Congreso en Washington DC. he tenido el privilegio de dar conferencias y de compartir el emprendimiento, la creatividad y la innovación de los inmigrantes colombianos, quienes sin ninguna duda demuestran constantemente ser los mejores embajadores del país.
Colaboré en los inicios de Colombia Nos Une en Nueva York, y fui miembro fundadora de NACAO, la asociación que llegó a agrupar más de 100 organizaciones colombianas de EE.UU. y Canadá, en reuniones en las ciudades de Atlanta y Houston.
Con esa experiencia directa sobre el empuje, la solidaridad y la generosidad de los migrantes colombianos, me sorprende el desconocimiento de sus derechos por el gobierno colombiano, una incomprensible paradoja si analizamos la contribución de la diáspora a industrias como el turismo y el comercio nacionales, y su colosal aporte a la economía a través de las remesas, más cuantioso que el de la exportación de productos y alimentos como café, flores, oro, banano y azúcar ¡sumados! industrias que sí reciben la atención, el cariño y el merecido apoyo nacional.
Hoy estamos ante una nueva coyuntura. Desde el mismo Presidente, los Ministros, un número significativo de Congresistas, de Directivos de empresas y de universidades, hasta profesionales, empresarios y trabajadores de todos los niveles, han trabajado o estudiado en el exterior. Es decir que han sido emigrantes y hoy son retornados. Esperemos que sean conscientes de los esfuerzos de esas comunidades y que no escondan, sino que asuman y exhiban con orgullo esas camisetas que tanto cuestan.
El Presidente Duque y su equipo de gobierno han expresado su intención de integrarnos en la Construcción de País. Es inevitable la convocatoria a la ciudadanía en el exterior para conformar el consenso y la gobernanza. Entonces tenemos que reconocer la oportunidad de actuar, y comprometernos a hacer nuestra parte, para juntos lograr la gran visión de una política pública acogedora de esta comunidad generosa, que debe ocupar su merecido lugar en la construcción de una Colombia con igualdad, donde no exista la discriminación por residencia.
Es innegable que para empoderarnos debemos informarnos y comunicarnos, así que le propuse a Ricardo aportar nuestro granito de arena, reuniendo nuestras investigaciones y experiencias, junto con todo lo aprendido en nuestro encuentro con los colombianos en el mundo.
Así fue como acordamos emprender la tarea de publicar una colección de libros con la doble función de fortalecer y visibilizar a los colombianos en el mundo, y de sensibilizar a quienes toman decisiones públicas en Colombia, para que nos incluyan en su radar en procura una gestión migratoria integral y eficiente.
La estrategia es develar la temática de los migrantes dentro y fuera del país, para que todos puedan estar bien informados y participar democráticamente en la obtención de instituciones que nos traten como lo que nunca dejamos de ser, ciudadanos de primera, que nos ayuden a desarrollar nuestro potencial e integrarnos en la distancia, brindando un aporte más significativo para construir el país que añoramos, más digno de los grandes sacrificios y de las capacidades de los colombianos en la diáspora.
A comienzos del 2019 nació esta colección Colombianos Invisibles, cuyo primer libro, Gestión Migratoria Inexistente, -2ª edición, 2020- apreciamos que hoy tenga en sus manos.
Esperamos que sus temas lo inspiren y lo motiven a participar de esta valiosa causa, compartiéndola y ayudando a difundirla.
Por: Lucy Torres
Prefacio Segunda edición del libro “Gestión Migratoria Inexistente”
Para adquirir en versión física o digital el libro “Gestión Migratoria Inexistente – Colombianos Invisibles”, solo tienes que ingresar al siguiente enlace:
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