Ingreso a Estados Unidos sin documentos, el gran peligro
¡Por Dios, créanlo!, esta es la peor época de la historia para tratar de ingresar ilegalmente a Estados Unidos. Muchos aspirantes a violar la frontera norte, se han tragado el cuento de que el actual gobierno de Joe Biden ha sido más flexible con quienes intentan ingresar sin documentos legales a este país. Eso no es cierto. Cada vez es más alta la cifra de colombianos deportados y, ni se diga, de los arrestados intentando ingresar ilegalmente por cualquier vía.
Colombianos detenidos en la frontera con Estados Unidos
Entre octubre de 2021 y septiembre de 2022, más de 120.000 colombianos fueron detenidos en la frontera sur de EE. UU., según la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), un aumento de más del 2.000% con respecto al año fiscal anterior, cuando se encontraron 6.202 colombianos.
De acuerdo a una publicación de Infobae, apoyada en datos de la Patrulla Fronteriza, “tan solo durante el mes de abril del 2023, fueron detenidos 18.788 colombianos en territorio norteamericano tras ingresar de forma irregular, lo que ubica al país en el tercer lugar de la lista de naciones emisoras de inmigrantes ilegales, antecedido por México con más de 67.800 arrestos y Venezuela con alrededor de 41.000 capturas”. Una de las últimas deportaciones masivas ocurrió el pasado 10 de Mayo cuando 209 ciudadanos colombianos fueron enviados a Bogotá en un vuelo de Eastern Air Lines. Muchos de ellos se quejan de tratos inhumanos por parte de las autoridades migratorias estadounidenses.
Dar apoyo a ciudadanos indocumentados es un delito
Para quienes tengan esos planes, es importante que sepan que los indocumentados son el “conejillo de indias” en la absurda guerra sin cuartel que libran los dos bandos que dominan la política en Estados Unidos, o sea, republicanos y demócratas. En los estados con mayoría republicana se han aprobado leyes que convierten en criminales a ciudadanos o residentes legales estadounidenses que brinden apoyo a un inmigrante ilegal. Albergarlo en sus viviendas, darles cualquier ayuda e incluso transportarlos en sus vehículos, convierte en delincuentes a los infractores.
Hasta eso han llegado las cosas. En otra columna les estaré hablando de una de esas leyes infames en el estado de Florida, quizás el más apetecido por los inmigrantes colombianos, donde ha sido aprobada la ley más severa contra inmigrantes indocumentados en la historia de Estados Unidos.
Autonomía para permitir o no el ingreso de extranjeros a Estados Unidos
Créanlo o no, aunque sus documentos se vean aparentemente legales, si el agente de inmigración que le atiende en el aeropuerto o puerto, o frontera de ingreso, tiene la más mínima sospecha acerca de usted, dicho agente goza de total potestad para regresarlo(a) a su país de origen sin que tenga que dar la más mínima explicación. Esta política, que tuvo su origen durante el mandato de Donald Trump, se ha mantenido, sin misericordia alguna, con el actual gobierno.
Ganadores y perdedores de la migración hacia Estados Unidos
Dentro de todo este malévolo engranaje, está muy claro quiénes son los ganadores y quienes los perdedores. Estos últimos, indudablemente, son los incautos compatriotas que se dejan convencer de que el llamado “país de las oportunidades”, también es para ellos, así no ingresen con documentos que les permita trabajar legalmente aquí. Y, los grandes ganadores se dividen en dos grupos: Los llamados “coyotes”, algunos de ellos amparados por empresas y entidades aparentemente legales, quienes se llevan las ganancias financieras del engaño; y las autoridades migratorias que, entre mayores cifras de arrestos y deportaciones muestren, mayor presupuesto y beneficios obtienen.
Y, peor aún, muchos de los perdedores, es decir, compatriotas colombianos que tratan de ingresar ilegalmente a Estados Unidos, cometen el peor de los atropellos y delitos, exponer a menores de edad a tan cruel odisea. De los deportados el 10 de Mayo, 102 son menores de edad, es decir, casi la mitad.
Por favor, no lo hagan, no lo intenten. Si alguien, familiar o amigo, o cualquiera, le brinda la más mínima esperanza, le está mintiendo, lo está o la está engañando.”
(Vea aquí relacionado con el tema: “Deportados desde los Estados Unidos, maltratados y humillados peor que animales”)
Fuente: Fernando Escobar Giraldo – Eje21
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